Hace 1 año la coordinación en seguridad entre Estados Unidos y México falló, reconoce el diplomático.
Después del encuentro de la administración de Joe Biden con el presidente electo Donald Trump, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Zalazar, dijo abiertamente que la posición de su gobierno es reconocer que la política de “abrazos no balazos” no funcionó para la inversión en seguridad que tanta falta hace para controlar y contener al crimen organizado.
El interlocutor diplomático esta dejando de serlo para abrir sus cartas que son las del gobierno norteamericano y que espera que la presidenta actual Dra. Claudia Sheinbaum, desarrolle en los hechos su visión y proyecto de seguridad como lo ha dado conocer, sobre todo retomar la coordinación estrecha entre instituciones, gobiernos estatales y socios, son fundamentales para el éxito de esta lucha, advierte el embajador.
En la conferencia de prensa dijo que el pueblo de México merece vivir sin guerra, una afirmación fuerte que el gobierno oficialista nunca ha aceptado, y explicó que desde hace 1 año (el famoso cumpleañero de hoy 13 de noviembre) el expresidente de México, Andrés López Obrador, no quiso aceptar ayuda de sus socio y por ello, la coordinación entre Estados Unidos y México fallo, reconoció.
Cerró la puerta a 32 millones de dólares, que se le ofrecieron al gobierno mexicano por parte de Estados Unidos, el gobierno de “abrazos no alcanzó para tantos balazos”, ironizó el funcionario.
“Para alcanzar la seguridad en México, tiene que haber trabajo como socios respetando la soberanía”, dijo Ken Zalazar.
Hasta la fecha nunca ha aclarado lo que el gobierno mexicano le exige de como se hizo para que Ismael Zambada llegara sano y salvo a Estados Unidos, donde ahora se maneja el secuestro de este famoso personaje del crimen organizado que trabajo durante 60 años sin ninguna vez ser atrapado, hasta esta vez.
Además, aclaró que la pausa con el gobierno de Estados Unidos fue antes de la posición del gobierno norteamericano con respecto a la reforma judicial que ha sido muy criticada tanto en el interior del país como en el extranjero.
El gobierno estadounidense ve la pérdida de los contrapesos y sin garantías jurídicas y estado de derecho, donde sus inversiones quedan expuesta ante un gobierno imparable en sus desviaciones por la sobrerrepresentación en el poder legislativo y la supremacía constitucional y que no habrá ninguna defensa ante posibles conflictos con el gobierno del 2do piso o de la continuidad.
La llegada de Donald Trump ya se dejó sentir sin tomar posesión en enero, el gobierno de Biden ya esta a través de Ken Zalazar, enviando la posición dura e inflexible que se vendrá con la amenaza de repatriación de miles de migrantes a México como tercer país y la exigencia de mejores condiciones en el análisis del T-Mec sin esperarse al 2026.
Al tiempo, vienen sobresaltos fuertes para la primera mujer presidenta con A, contra un difícil de roer, el presidente norteamericano que ya no tiene nada que perder, más que cumplirles a sus votantes, que México es un país que tendrá que doblarse a sus exigencias.
¿Será esta la historia?, ojalá nos llamen a la unidad desde la presidencia y dejen la polarización para otros tiempos, porque no les va alcanzar la ideología de izquierda ante un populista de derecha tan fuerte y obsesivo.
Commentaires