El tablero de Trump

Por Bloomberg

El segundo día de negociaciones entre Estados Unidos y China alimentó el ánimo entre los inversionistas, sumado al reporte de que la confianza entre las pequeñas empresas subió en mayo, por primera vez en el año.

También hay optimismo entre los estrategas de Wall Street sobre las acciones estadounidenses, y los analistas de Morgan Stanley y Goldman Sachs son los últimos en sugerir que un crecimiento económico resistente limitaría cualquier retroceso durante el verano.

Pero las advertencias sobre la economía no paran. El Banco Mundial dijo que ésta podría ser la década de menor crecimiento desde los años 60, debido a las tensiones comerciales y la incertidumbre política.

Aunque el primer día de conversaciones entre Washington y Beijing fue calificado por Trump como bueno, el acuerdo entre las dos economías más grandes del mundo puede resultar muy complejo de navegar, si se toman en cuenta los temas que pueden utilizar como palanca en las negociaciones, incluyendo visas, motores a reacción, software de diseño de chips, etano y tierras raras, entre otros.

A la espera de mayor claridad sobre el futuro de la economía, los pequeños inversores de Asia, que se apresuraron al mercado bursátil estadounidense para comprar las caídas, están cambiando su estrategia, mientras los operadores de metales preciosos de los principales bancos celebran que, en el primer trimestre de 2025, tuvieron sus mejores resultados en cinco años.

Ahora los inversionistas están a la espera de conocer los datos de inflación de mayo, que se pudo haber acelerado, según las expectativas de los analistas, así como los cambios que los senadores republicanos quieren hacer a la propuesta de ley fiscal de Trump.